Sin duda, el Moulin Rouge es mucho mas que el siempre atractivo Can Can y sus bailarinas, que tanto le gustaban a Toulouse Lautrec. El show actual, Feerie, incluye otras cosas. El desorbitante numero de espectaculares trajes -!Y lo rapido que se los cambian!- compite, por la atencion de los espectadores, con las increibles representaciones de los distintos interpretes. Desde piratas y princesas hasta payasos y cosacos bailando. Las dos horas de autentico espectaculo en el Moulin Rouge te tendran con los ojos pegados a lo que pasa en el escenario. Obviamente hay un nombroso contingente de turistas entre la feliz audiencia, pero eso tambien forma parte del show, sobre todo porque la participacion del publico es vital en alguna de las actuaciones.
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